Frag-sueños (1)

Un día (probablemente y, valga la redundancia era de dia) me encontraba en el locutorio de mi viejo. Estaba ahi haciendole compañia o ayudandolo con algun problema y/o atender a la gente (una excepcion). Habian pasado varias horas, casi todo el dia hasta que me fui. Cuando sali no me encontraba en Palermo/Recoleta (donde usualmente suele estar el locutorio) sino que era alguna avenida enorme (como decir Callao o Corrientes, pero fusionado con Las heras y su parque) que llegaba a un puente que conectaba la autopista (panamericana).

Desde ya, que en los sueños las cosas no son como son normalmente entonces estas minimas referencias de lugares son solo eso (repito: en los sueños) referencias.

Había cruzado casi toda la avenida llegando al puente para subir, cuando empeze a pensar en si me habia despedido de mi viejo o no. En fin, ya estaba casi llegando al puente cuando pense "no importa, de cualquier manera lo voy a llamar despues para preguntarle si tengo que comprar comida a la noche, antes de que él llegue".

Cuando empiezo a subir el puente para llegar a la parada del 168, habia algo raro (sin mencionar que ahora, es totalmente ilogico lo que escribo...pero bueno, asi son los sueños)

el puente o, mejor dicho, el camino que llevaba a la parada estaba todo cortado y cerrado al publico por, seguramente, alguna construccion. En su lugar, se habia abierto un camino paralelo que llevaba hasta la cima del puente.

Este camino tenia dos alternativas: por un lado 1 "carril" tenia una especie de escalera (en realidad eran como ladrillos en el piso que funcionaban como una escalera, pero estos ladrillos eran en realidad como partes de los conos naranjas que se usan en ocasiones para cortar las calles) al lado de esta escalera habia como una baranda (tb hecha del mismo material: conos) que estaba puesta para que se ayudase la gente a subir. Y, al lado de esta baranda, se encontraba el otro carril, que era, practicamente, una subida (su "empinacion" era muy parecida a las rampas para personas discapacitadas)

Y ahí me encontraba yo, detrás de una señora muy obesa (la cual, creo que era la misma mujer a la que un día le saque una foto mientras caminaba por la calle. Es mas, la ropa era la misma), subiendo por los escaloncitos. La señora tardaba, pero no porque le costara subir, sino porque se tomaba su tiempo. Así que, en un determinado momento me canse y salte la baranda para seguir por la "subida". Todo venia bien, hasta que de repente la subida se empezó a hacer mas y mas empinada. Me tuve que agarrar de la baranda como apoyo para continuar. Y cada vez venia mas y mas empinado, mas que caminar, ya era prácticamente escalar.

Sin embargo, la señora (y otras personas también) venían por las escaleras (las cuales también se empinaban mas y mas) como si nada. Ojo, se tomaban su tiempo.

Luego de unos eternos minutos y de tomar mas fuerza para escalar, ya casi llegaba a la cima (la cual, mas ilógico todavía era como un agujero en la tierra y había que treparse para subir) Cuando llegó el momento de trepar mis brazos ya estaban como muy cansados de todo el esfuerzo que había hecho para llegar hasta allí. Así que, sin mas casi me dejaba caer al vacío. Por fortuna arriba en la cima y detrás mio habían personas que me habían agarrado de la mano y ayudado a subir. Una era una persona alta, contextura normal y con barba. Le agradecí una vez que estuve arriba y él, luego de devolverme el agradecimiento, bajaba como si nada.

(escenas desaparecidas...fin)